El modelo de gobernanza de las mutualidades encarna el principio de solidaridad, aspecto fundamental de la protección social, y se halla a medio camino entre la titularidad pública y la privada. Desempeña una función esencial en los sistemas de salud nacionales, en el apoyo a la familia y en otras áreas de los servicios sociales, por lo que goza de una creciente aceptación en el ámbito de la prestación de servicios de atención institucional a las poblaciones que envejecen.

En muchos países, las mutualidades constituyen uno de los pilares más importantes del marco de la protección social integral, que se apoya en los regímenes públicos de la seguridad social, las ayudas estatales y la participación activa de organizaciones no gubernamentales y de voluntarios. Las mutualidades, así como las cooperativas, las fundaciones y las asociaciones, son elementos fundamentales de la economía social. Sus programas son asequibles y han resultado ser eficaces para reducir la pobreza y las desigualdades, lo que permite a los diversos grupos de población afrontar con resiliencia las dificultades de la vida. Las mutualidades tienen rasgos característicos que las distinguen de otros tipos de organizaciones: se rigen por el principio democrático de “un miembro, un voto”, lo que permite a los miembros intervenir activamente en el proceso de adopción de decisiones y establece así un vínculo social entre ellos; desarrollan sus actividades en marcos legislativos que impiden la discriminación en la selección de los miembros; y se esfuerzan por actuar de acuerdo con las políticas públicas y sus principios de universalidad, solidaridad y responsabilidad mutua.

Teniendo en cuenta el perfil histórico e institucional de las mutuas, el principal objetivo de la Comisión Técnica de la Mutualidad de la AISS es ejecutar un programa de actividades coherente mediante el intercambio de conocimientos relativos a las mejoras técnicas y administrativas. En particular, la comisión técnica ha reunido numerosos testimonios de buenas prácticas que demuestran el enorme potencial que tienen las mutuas para extender la cobertura de seguridad social y mejorar la suficiencia de las prestaciones y los servicios.

Las prioridades actuales de la Comisión Técnica de la Mutualidad se centran en las necesidades cambiantes de una población que envejece, en la cobertura de la seguridad social en un mundo cambiante y en el papel de la seguridad social en la promoción del crecimiento inclusivo y la cohesión social. Teniendo en cuenta estas prioridades, la Comisión goza de un amplio reconocimiento por su permanente contribución a las actividades de investigación e innovación de la AISS en cuestiones como las brechas en la cobertura de los grupos difíciles de cubrir, la formación de proveedores de cuidados, la rehabilitación y las experiencias innovadoras en materia de cuidados paliativos y autonomía de los adultos mayores.