La innovación en el lugar de trabajo, la evolución de los procedimientos de trabajo o el uso de nuevos productos y materiales en el trabajo, pueden dar lugar a la exposición a nuevos riesgos. La investigación en el ámbito de la prevención desempeña un papel decisivo para determinar y abordar estos riesgos. La investigación y el desarrollo, incluida la investigación en materia de evaluación, garantizan una mejora continua de la calidad de los servicios de seguridad y salud en el trabajo.