Si bien las políticas de financiación varían en función de la institución de seguridad social, muchos sistemas cuentan con fondos de reserva de corto o largo plazo que exigen una gestión efectiva. A medida que las poblaciones envejecen y que el entorno de inversión se torna más complejo, aumenta la importancia de un fondo de reserva bien administrado. Probablemente se haga cada vez más hincapié en la gobernanza de las inversiones. Los profesionales que intervienen en el proceso de inversión deben asegurarse de que su aporte se ejecute de modo apropiado.
El papel del actuario y el de otros profesionales en la gestión de los fondos de reserva es cada vez más importante. El actuario probablemente participe en varias áreas diferentes relacionadas con el proceso de inversión. Es importante que todos los análisis se realicen aplicando los principios actuariales generalmente aceptados, en particular en lo referente a la metodología y las hipótesis empleadas en los cálculos. Habrá procesos apropiados de revisión por homólogos y será esencial trabajar en estrecha colaboración con otros profesionales en el proceso de gobernanza de las inversiones, en la comunicación y elaboración de informes y en otras áreas del proceso de inversión donde se requieren aportes actuariales. Probablemente también sea valioso el aporte actuarial para la apreciación del riesgo y su incidencia en las actividades de inversión de la institución. La función de inversión de la institución de seguridad social siempre tendrá en cuenta la opinión actuarial y los aportes sobre cuestiones relevantes. Deberá existir una cooperación regular y estrecha entre las distintas divisiones, según corresponda. Las políticas y estrategias de inversión deberán establecerse de acuerdo con el perfil de responsabilidad financiera del régimen (véase la Directriz 22). Habrá una estrecha colaboración entre la función de inversión y los responsables de la valuación actuarial.
Las Directrices de la AISS sobre la Inversión de los Fondos de la Seguridad Social abarcan cuestiones relacionadas con el proceso de gobernanza de las inversiones. Varias de estas directrices y sus recursos complementarios serán pertinentes para los actuarios que participan en el proceso de inversión. En esta parte se hace referencia explícita a estas directrices de inversión cuando procede. Asimismo, se recomienda a los actuarios que participan en el proceso de inversión consultar otra documentación pertinente sobre esta parte. La buena coordinación y la colaboración con otros miembros del personal que participan en el proceso de inversión son de suma importancia.
Los aportes actuariales también pueden ser deseables y solicitarse en otras áreas, como la supervisión y la reglamentación de las disposiciones suplementarias de capitalización, las proyecciones de adecuación del sistema, la estimación de los costos de ciertos sistemas y el cálculo de los factores de las prestaciones. En dichos casos, se aplicarán hipótesis y metodologías apropiadas para evaluar los valores actuales y proyectar correctamente las estimaciones del futuro valor de los activos. Esto deberá procurar que los aportes actuariales no sólo sean apropiados, sino que el enfoque coincida con el de otras áreas de contribución actuarial (en particular en relación con la metodología y las hipótesis).